Personalicé el escritorio, los folders y hasta bajé unos íconos muy chidos para reemplazar los que ya vienen, pero ahí fue cuando me dí cuenta que no era el "mi" mac, sino de la oficina, pues no soy (ni podré ser) "administrador" de la compu (denme chance!!!) por lo que no pude "personalizar" aún más mi compu.
Debo aceptar que todavía tengo ese remordimiento que uno siente cuando traiciona a alguien. "No eres tú, soy yo, pero ahora estoy con ella".
A ver como me va. Bueno, por lo menos va más con el estereotipo del "publicista".
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