Debo aceptar que esa pregunta me aterra que me la hagan, ¿por qué? pues porque no tengo ni la menor idea. Y más me aterra cuando mi padre lo hace, porque me hace sentir un tanto mal ("cómo?! no tienes plan?" zaz!). Tal vez tenga un plan mas o menos armado para este año (pero ni así ja!, pues uno nunca sabe , todo cambia de un día, o de una semana para la otra!), así que esa incertidumbre, multiplíquela por 5, y pues ya sabrá el miedo que se genera dentro de mimismo. Y pues más temor en esta época ya que, por ejemplo, nadie puede jugarle al adivinaadivinador en los negocios, pues ahora imagínese jugar al adivinaadivinador con su propia vida. Pues no, ni con los divinos poderes de Beto "El Boticario".
Bueno el caso, es que hoy un personaje dedicado a la venta de seguros (sí, con su traje, su portafolios y toda la cosa) y de fondos de ahorro para el retiro, me hizo una pregunta todavía más preocupante: "Cómo te ves a los 65 años?". "Perdón?" (" a ver man'to, estás viendo y no ves"), "Sí, cómo se ve a los 65 años?". Silencio.
Después, de su traje y su portafolios (y de toda la cosa), sacó una bola de cristal metida de esas que invenctó el hombre blanco (o amarillo) que estaba metida en una computadora compaq (quien sigue comprando computadoras compaq??) y me soltó una de gitanos (ahora sí!) de que para recibir 8 mil pesos al mes cuando tenga yo la honrosa y momiza edad de 65 años, tenía que ahorrar quiensabecuantosmilesdemillonesdepesos al año, y que tenía que empezar desde ahora, a mis 29 años (según él, la edad perfecta para iniciar el ahorro). Me sacó a través de tecnológica bola de crista, de que pues también tenía que empezar a pensar que el costo del seguro a los 55 años cuesta quiensabecuantosmilesdemillonesdepesos y que debería empezar a ahorrar también para eso, para tan siquiera cubrir mi "seguridad" social. Sí, ahorrar para mi enfermedad que todavía no tengo. Chale, yo para lo que estaba ahorrando era para cambiar la tele, que sí tengo, por una tele nueva!
Me comenta el representante de seguros: "Nosotros lo que vendemos es seguridad". Claro, venden seguridad para una inseguirdad generada por ellos. Malditos y mil veces malditos. Al final terminé comprando una garantía para un seguro que todavía no tengo (o sea ¿cómo?, no sé, pero cuando me lo vendió sonó bien). Juré que no volvería a caer, como aquella vez. Pero, esta vez es diferente verdad???
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