Pero lo que no esperaba, es lo que me acaba de pasar. Hace unos momentos, en mi auto en camino a la oficina, me dí cuenta de un (casi) sacrilegio. Esto porque, no suficiente con lo anteriormente mencionado, en su último spot (en donde vuelven a decir harta cantidad de "argumentos" para probar que trabajan), nuestros amadaos y nunca bien podnerados diputados, usan una canción de uno de los mejores músicos que ha conocido el rock: Ritchie Blackmore.
Qué tristeza me dió darme cuenta de esto. Malditos, mil veces malditos!
Esta es la canción que han (seguramente sin pago de derechos) usado para la promoción de sus "grandes logros".
Que horror con nuestra (bajísima) clase política.
Publicar un comentario