Dejé que se expresaran los del piso medio. Sí, esta mañana el grupo más númeroso de trabajadores del piso medio que había visto, se conglomeró frente a mi casa presidencial y cual canción de primaria dijeron: "voy de frente y no me quito".
Así que esta mañana por un momento les dí el control de otras partes de este mi país. Les cedí el control motriz de mis manos y vocal de mis labios.
No sé que tan bueno haya sido, espero que esta acción de mi democracia interna no genere (todavía mayores) conflictos diplomáticos con las naciones hermanas.
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