Yo lo sé, tengo una mezcla (a veces no muy positiva) de impulsividad, curiosidad y (alta necesidad de) expresión. Zaz, si yo leo esto, pareceriera que soy un artista de cuarta, que se cree a sí mismo, un ser totalmente incomprendido. Así que hago la advertencia, lo que escribo no es con ese motivo, ni desde esa perspectiva, sino como siempre, como un mero autoanálisis.

Lo admito, a veces esa necesidad de expresión es totalmente irracional y va cual barredora de nieve, sin importar lo que tenga a su paso. Pongamos como ejemplo lo que ahora acontece. Tengo mil madres que hacer en el trabajo que son para mañana, y no puedo hacerlas hasta que no aterrice en esta pista lo que necesita aterrizar.

Cada vez más, me estoy dando cuenta, que mi adicción a la verdad, crece (yo sé, cada vez que escribo de esto y lo leo, se escucha super mamón, pero créanlo, no es con un motivo de buscar la "superioridad" -ja!-, sino principalmente el entendimiento personal y de mi entorno). El único tema es que, que como cierta droga poderosa (poderosísima), hay que saber manejarla.

Me sucede con cierta frecuencia que la impulsividad, curiosidad y la expresión de la verdad, llegan a conjugarse no en el mejor momento, o tal vez, no de la mejor forma. Me sucedió este fin de semana. Tuve la curiosidad de conocer (que suele acrecentarse cuando la persona que acompaña la plática, es tremendamente interesante), y esto se mezcló con la impulsividad y la expresión de la verdad. Lo hice. Espero no haber causado un daño, o poner cierta barrera, que son totalmente innecesarios.

En fin, creo que en este caminar por entender las implicaciones de la verdad, aprendo cada vez más, y eso, me encanta. He aprendido que en la fórmula anteriormente "descubierta" en esta pista clandestina acerca de la verdad ("inhalar verdad exterior, exhalar verdad interior"), debiera contemplarse el tema de la intensidad de esa respiración. Habrá veces en las que uno tendrá que exhalar con mayor fuerza; habrá otras en las que no. "Aprender a respirar", dice el M&C.

Vamos por la vida, como siempre, aprendiendo. En fin. No me cabe duda que este año, pinta realmente interesante.

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Este fin de semana estuve de nueva cuenta en las tierras del Hudson. Ya me están dando más ganas de vivir por allá ja! Entre tantas cosas que hice (además de tragar carbohidratos como loco), ví "The Lion King" (ESPECTACULAR), caminé y conocí mucho. Pero me quedé con ganas de ver "Rock of Ages" (jaja sí, yo sé que me quedé atrapado en el Rock de los 80's, pero cantan "Don't Stop Believin'" cómo no querer ir a verla?!?! ). (Por eso y muchas cosas más) ya volveré A NYC.

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Por escribir acá, no sé a qué hora voy a terminar hoy #yisushelp

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