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09
Hay "n" cantidad de tipos de sueños, pero para ser pragmáticos, los dividiré en dos categorías: los que uno mismo crea (léase fantasías, objetivos a cumplir, videos personalizados de automotivación, chaquetas mentales, etc, etc, etc) y los que lo agarran a uno por sopresa cuando uno está dormid.En esta última semana, los del segundo conjunto de Venn, me han tratado, de cierta forma, un tanto mal. Me explico con un ejemplo.
Hoy por la madrugada, me levantó una pesadilla ("quesadilla" diría mi yo de 7 años). Mucha violencia, pero manifestada en miedos, máscaras, golpes que no llegan a su objetivo, ayuda infantil, risas sin sentido. Me levanté temblando (como hace mucho no recuerdo que me pasara). Ya despierto (o eso creo yo), una amable voz me dijo: "no abras la puerta", a lo cual hice caso, pero en ese momento creo que se refería a la puerta de mi cuarto, pero no sé si en verdad, se refería a una puerta interior, de la cual, desconozco localización. En fin, no abrí, y aquí me tienen aterrizando, para bien o para mal.
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Ciertas manifestaciones han llegado a las calles de nueva cuenta. Mismas consignas, diferentes motivadores. Lo bueno, es que los trabajadores han sabido reunirse rápido en mesas de negociación y han actuado con prontitud para acallar a los manifestantes.
Admito que es un tema un tanto frustrante esto del resurgimiento de estos grupos separatistas, sí. El tema aquí es que sería altamente útil, tener un equipo de contraespionaje, que pudiera encontrar el lugar y la hora en donde los manifestantes, se juntan para planear su siguiente manifestación. Y así, cual equipo de SWAT, poder llegar a esa casa de seguridad con toda autoridad y detener la manifestación, antes de que esta suceda.
En eso estamos, pero como siempre en el trayecto, aprendiendo.
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De mi despedida he sabido poco. Al parecer, todo llegará a su tiempo (espero).
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El que trate de matar sus demonios internos, creo que está en un error, porque creo que además de ser una tarea imposible, puede tener como consecuencia un autodesconocimiento terrible.
Creo que hay que hacerle a-la John Nash: Identificarlos, verlos, saber que estan ahí, e incluso poderles invitar una tacita de café.
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El nuevo viaje está casi planeado, ya quiero que sea.
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