oct
10
Hospitales. Aeropuertos. Amigos. Son las tres palabras, conceptos, ideas que considero maldibenditas. Tal vez existan más, pero hasta ahora, en mi experiencia personal, son las que mejor manifiestan ese concepto.Ahora, a qué me refiero con "maldibendito"? Bueno, pues a la capacidad de que esa misma palabra tenga un significado altamente triste o alegre, según sea el contexto en el cual cobra vida.
En el caso del hospital y del aeropuerto, creo que es muy claro por qué las considero maldibenditas. Pero en el caso del "amigo", me explicaré (aunque creo que tampoco es taaaaan complicada la relación cielo-infierno).
Tener, o ser un amigo, es una gran bendición. No me explayaré en las bendicionesen todo lo que significa ser un amigo, ya cada quién tiene, una definición muy particular muy generalizada, que de fondo se manifiesta en todos los seres humanos. Me adentraré en el lado maldito. El tema es que esa palabra, concepto, idea, posición, adejtivo, se vuelve infierno cuando el contexto te lleva a ser el "amigo" de la persona a la cuál uno busca ser más que un "amigo". Ud. entenderá. Por eso la considero una palabra maldibendita.
Cansado estoy de ser (o haber sido), ante varias personas, ese "gran amigo". Será que cuando los dioses decidieron pasarme por la línea de producción, no me incluyeron en la etapa de "relaciones amorosas", y me dejaron más tiempo en la de "Amigo"?. Y que por lo tanto, cigüeña tenochca voló hacia mis padres y me entregó a ellos, con todo y ficha técnica, con las características y especificaciones de "Modelo 1980, versión Amigo"?
Amigo: Palabra maldibendita.
Publicar un comentario