Este compañero de viaje (el "susodecido", diría mi padre), era un hombre honesto, trabajador (mucho), que amaba abiertamente a su novia (se notaba, viajaban juntos) y que especialmente, decía las cosas como son (o como eran para él), sin tapujos, sin cortina de doble costura, sin tapar la rendija. {El era totalmente transparente (desde sus pensamientos, emociones e incluso manifestaciones corporales, y él estaba totalmente agusto con esa transparencia propia (era tan transparente que no se preocuaba si estábamos todos presenciando una discusión entre él y su novia). El realmente vivía con la filosofía de "Si lo sabe Dios, que lo sepa el mundo". Una buena persona, de corazón, silvestrona, pero muy buena persona (verso sin hacer esfuerzo, hmmm bueno, la verdad es que si me tom{o un poco ja!)
A veces nos llega a molestar personas que son así. Tal vez por un poco de envidia o tal vez porque no estamos acostumbrados a que la gente se muestre tal y como es. Estamos tan acostumbrados al juego de "vístete que ahi te voy" (sin albur). Es decir, a ponernos a pintar la fachada con estuco, pintura y todo cierto tipo de adorno churriguresco para que la gente se entretenga el fachada y no tenga ni el más remoto interés de ver que tal nos sale el acabado de interiores. Y me he dado cuenta también que yo me he preocupado más, en diversas (y frecuentísimas) ocasiones, al arte del fachadismo más que al de los interiores.
Pero igualmente, me he dado cuenta con el paso del tiempo, que disfruto cada vez más de la gente que se preocupa más por el acabado de interiores que por la fachada. Se platica más agusto, se cuestiona uno más cosas y uno aprende más. Y esto mismo me sucede con los pueblos o comunidades, admiro más a quien no busca ser alguien más y que es solamente es lo que es. Su pueblo podrá ser solamente de maíz y papa, pero son suyas y está orgulloso de ellas.
El fachadismo a veces es difícil de pericibir, pero si miramos bien, empezaremos a distinguir el uno del otro. Habremos ido de vacaciones y muchas personas nos tratan amablemente porque saben que con ese comportamiento, es probable que reciban una propina. Pero igualmente hay personas que son amables porque así son, amables, acecas. No buscan el "gracias", ni el "ahí le va jóven", ni la propina del 15%. Prefiero a alguien con un rango de emociones y de un interiorismo más amplio y con sus "bemoles" (y por qué no también con sus "sotenidos") que a quien es experta del fachadismo perfecto. de Es por eso que a veces se me complica relacionarme con algunas personas u otras culturas. Personas que siempre están "felices" y todo esta "cool", maravillos y estupendo, me hace sentir que no puedo conectar con ellas, porque siento que están ocultando lo que verdaderamente están pensando así como sus falacias (que también son buenas). Prefiero que me digan las cosas como son. Es más constructivo.
La preocupación por el fachadismo se da también en el arte del buen (o mal) vivir. Por ejemplo, en mi búsqueda por departamentos hace unos meses, en la gran mayoría de los clasificados, la foto de la fachada era buenísima (así como la ubicación), pero faltaba abrir la puerta para encontrar que el depa se había convertido en calabaza justo al cruzar el marco de la puerta principal. Esto se repatía en la mayoría de las ocasiones. En México nos importa MUY poco el interiorismo. Y de interiorismo en todos los aspectos, desde el residencial, hasta el espiritual.
Yo me he dado cuenta que necesito trabajar en mi interiorismo, desde el residencial hasta el espiritual. También me he dado cuenta que tendré que seguir jugando al fachadismo en algunos aspectos de mi vida, pues hay quienes sólo se fijan en eso, y ponen a uno barreras para poder mostrar el interior de la casa. A ellos, lo que les gusta ver es el exterior, y pues bueno, para poderles mostrar el interior, tengo que mejorar mi fachada. Esto es para lograr un bien mayor (eso espero!!).
En fin, en estos días de regreso a las tierras tenochcas (de virus y de calles vacías), me dedicaré a mejorar el interiorismo residencial (ya lo necesitaba). Los días posteriores, seguiré con el espiritual.
Estoy cansado y tengo el horario voltea'o. Yo creo que lo que dije fueron puras redundancias y no más no llegué a nada ja! Me voy a dormir.
PD Ya pa'terminar comparto con uds una frase que creo resume un poco lo que quiero (o quise) decir (dispensen de nuevo, ya no se si voy o vengo!). En tierras de color rojo una persona local me comentó lo siguiente: "Podremos ser pobres, pero siempre nos alcanza para una sonrisa". A eso me refiero chinga'o :)
No me llego nada el sábado!